Acabo de leer un artículo de Cedric Fluckiger y Eric Bruillard cuyo título es TIC : analyse de certains obstacles à la mobilisation des competences issues des pratiques personnelles dans les activités scolaires. A partir de una serie de estudios empíricos estos investigadores franceses exponen interesantes observaciones:
1. Los alumnos desarrollan, en su vida personal y social, una serie de habilidades que les permiten participar en chats, blogs, foros, etc.; acceder a contenidos multimedia (vídeo y audio) y recuperar información de sitios web.
2. Estos usos de los alumnos deberán facilitarles adquirir la competencia digital en el ámbito escolar. No obstante, la transferencia de competencias entre estos dos universos- personal y escolar- es difícil:
a) Las competencias desarrolladas en el ámbito personal son más bien locales y contextualizadas que transversales.
b) Existe un hiato entre las prácticas personales- manifestación del proceso de individualización y autonomía del adolescente, el acceso a los medios de comunicación y a una cierta independencia cultural respecto de los gustos de sus padres- y las prácticas escolares- sujetas al contrato didáctico- de los alumnos.
c) La facilidad con que manejan el navegador o la mensajería instantánea no debe ocultar una débil autonomía, una falta de conceptualización y de comprensión de los mecanismos informáticos y una muy débil capacidad de verbalización de sus prácticas, de tal manera que la transferencia a otros ámbitos- el escolar- es muy difícil.
d) Los comportamientos y fines son muy diferentes. Ponen como ejemplo la búsqueda de información en el navegador:
Según el gráfico, el alumno usa el siguiente esquema de navegación: en su casa realiza una búsqueda en Google y analiza en profundidad el sitio escogido. El botón Ir a la página anterior del navegador es raramente usado para retornar a la página inicial de la búsqueda, de tal modo que si después de visualizar varias páginas, el resultado no es satisfactorio, es habitual que realicen una nueva búsqueda, aunque sea idéntica en palabras de búsqueda a la precedente.
Sin embargo, en el ámbito escolar, su esquema de navegación es diferente. A partir de la página que les devuelve Google, extraen la información de- a lo sumo- una decena de páginas y la copian en su procesador de textos. Por ello, a diferencia del comportamiento en casa, no penetran en las páginas, sino que hacen un uso intensivo del botón Ir a la página anterior para regresar a la página de resultados de Google.
Tras estas observaciones, los autores concluyen del modo siguiente:
Une vision de sens commun et les discours un peu rapides sur la génération internet, les digital natives ou les new millenium learners, etc., invitent à imaginer un groupe compétent face à des propositions scolaires associant trop peu les technologies informatiques pour que ces compétences puissent s’exprimer, conduisant à demander à l’ école de s’adapter au monde des enfants ou des adolescents.
Cette vision n’est pas totalement erronée, mais nos études montrent qu’à la fois les compétences censées autre acquises ne sont pas si développées et qu’elles sont difficilement mobilisables en contexte scolaire.
Cette recherche, il faudrait determiner les compétences qui passent effectivement d’un contexte à l’autre (les aspects à« basiques à» de manipulation par exemple) ainsi que les mécanismes qui pourraient faciliter ce passage. Cela devrait également permettre de proposer quelques recommandations pour la formation. On peut sans doute avancer l’idée que c’est en leur donnant les moyens de comprendre ce qui se passe, c’est à dire d’avoir une distance critique à leurs pratiques qu’on peut faciliter le transfert des compétences. En dehors des compétences techniques, il faudrait également s’intéresser à certaines compétences « interactionnelles» ou « communicationnelles» que les adolescents développent dans leurs pratiques et qui pourraient trouver un écho dans les activités scolaires.
Sobre estas conclusiones, creo que, desde la práctica en el aula, podemos insistir sobre alguna de estas ideas que esbozan:
a) La funcionalidad de los aprendizajes escolares. Es preciso realizar un esfuerzo para que esa frontera- o hiato, tal como ellos lo denominan- entre los ámbitos personal y escolar se debilite. La enseñanza por proyectos o tareas es una metodología educativa que puede ayudarnos en este esfuerzo.
b) La reflexión sobre las prácticas tic. Me parece evidente que una de las tareas del aprendizaje en la competencia digital ha de ser la reflexión, el análisis, el juicio valorativo… sobre esas prácticas que realiza habitualmente el alumno en soledad, esto es, desarrollar su pensamiento crítico.
c) La competencia comunicativa. La competencia digital del alumno, más allá de garantizar un dominio técnico suficiente de herramientas, debe permitirle acceder a sitios fiables, seleccionar la información, estructurarla y ser capaz de producir, a partir de ella, nuevo conocimiento.
Actualización 20-12-2008. Juan Freire informa por extenso en una entrada de su blog sobre los resultados del proyecto norteamericano Digital Youth Research, un estudio sobre el uso de los medios digitales por los jóvenes.